Cataluña recibe 2.160 menores migrantes en solo seis meses
La oposición reclama al departamento de Trabajo y Asuntos Sociales una mejor gestión de la Renta Garantizada y de la dependencia
La llegada de menores migrantes no acompañados a Cataluña se ha multiplicado exponencialmente en pocos años. En 2016 la comunidad acogió a 800 personas y en 2017 subió a 2.000. Solo en lo que llevamos de año esta cifra ya se ha superado, hasta los 2.160 menores. La situación de emergencia social que conlleva este incremento centró ayer buena parte de las intervenciones en la primera comisión parlamentaria a la que asistió el consejero de Trabajo, Asuntos Sociales y Familia, Chakir El Homrani.
El consejero destacó que una de sus primeras actuaciones ha sido destinar 10,5 millones a programas de atención y acogida de estos migrantes, con la creación de 400 nuevas plazas. “Es uno de los retos más importantes que tenemos como país a corto plazo, y tenemos que remar juntos”, pidió El Homrani a los grupos de la oposición. Estos reivindicaron más esfuerzos por parte de la Administración para que los menores no se vean obligados a pasar noches en celdas de la Ciutat de la Justicia mientras esperan una plaza de acogida.
El Homrani también situó como una prioridad para su departamento la lucha contra la precariedad laboral en los jóvenes, y anunció que la Inspección de Trabajo terminará abriendo en 2018 1.800 expedientes para convertir contratos temporales fraudulentos en indefinidos. El consejero aseguró además que uno de los grandes retos del departamento es desplegar la Renta Garantizada de Ciudadanía, que ha beneficiado de momento a 112.000 personas aunque solo a 5.000 nuevos usuarios, ya que el resto ya contaban con una renta mínima de inserción.
